Pasión y división argentina

A una semana de la media sanción de la ley de interrupción voluntaria del embarazo, a poco más de 24 horas de que Morgan Stanley Capital International anunciara que la Argentina volvió a ser mercado emergente, a menos de 24 horas que la selección perdiera contra Croacia en Rusia en la segunda fecha de la primer ronda del mundial, en el país se siente un aire de confusión.

El 14 de junio, cerca de las diez de la mañana, luego de casi 24 horas de debate, se aprobó en el Congreso de la Nación Argentina la media sanción de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo.

Desde que los diputados de la Nación comenzaron a exponer sus posturas, por fuera del recinto la plaza se llenaba de pañuelos verdes y más tarde se unirían los celestes.

Era una imagen clara de la división del país fuera de toda opinión partidaria, sorprendente para Argentina que desde los unitarios y federales la sociedad se une y resquebraja por partidos políticos. La plaza se dividió en dos, y las imágenes hablan por sí solas.

Aún queda mucha lucha por delante. La vicepresidenta de la Nación, auto denominada “pro vida”, utilizó la segunda atribución de vicepresidenta y giró a cuatro comisiones el proyecto de ley. Los que están a favor de la legalización del aborto repudiaron su accionar calificándolo como innecesario y perteneciente “a una posición personal de la Vicepresidenta, con la finalidad de prolongar el debate indefinidamente.”

Por otro lado el miércoles 20 de junio, el ponderador estadounidense de fondos de capital Morgan Stanley Capital International, anunció que Argentina deja de ser mercado fronterizo para volver a ser, luego de nueve años, mercado emergente.

“A nivel global hay miles de fondos de activos que basan sus decisiones de inversión en índices de referencia. Morgan Stanley Capital International (MSCI) es el proveedor número uno de la industria de fondos basados en índices negociados en bolsa. Por lo tanto, lo que dijo MSCI impacta directamente en el destino que tendrán millones de dólares de inversiones financieras.” (La Nación, 20/06/2018)

Hace menos de un mes, el Gobierno realizó un acuerdo con el FMI, tomó deuda. Esta decisión sumada a la categorización del MSCI, influye directamente en la cabeza de los inversores. Quizá, la llegada de dólares podría aliviar la presión sobre el tipo de cambio y reducir la volatilidad cambiaria.

En Argentina el país se divide en “pro vidas” y “pro legalización”, en “pro-gobierno de turno” y “anti-gobierno de turno”, solo para nombrar la división con palabras lindas y no repetir atrocidades hirientes que no suman, sin olvidar los que dicen no meterse ni opinar, sea porque “las feministas no me representan”, “todos los políticos son iguales”, “si me pudiera ir del país, lo haría” y más frases de individualismo agudo.

Pero en algo todos estamos de acuerdo: todos somos directores técnicos de fútbol. Todos criticamos a Sampaoli, a Caballero y a Messi. Todos festejamos si ganan y los acribillamos si pierden. Somos el tercer país con más demanda de entradas del Mundial 2018. Se para el país porque juega Argentina; dejamos de trabajar y de estudiar, ponemos pausa en la rutina para mirar a la selección, les hablamos como si los jugadores nos estuviesen escuchando; reímos, lloramos, gritamos, y se nos llena el alma de emociones por ver a los jugadores representando al país.

Es fútbol.

Es pasión.

Que nos hace olvidar por noventa minutos que el país está dividido.

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